Si la confianza es algo díficil de construir, imaginate de reconstruir.
Si los besos robados son bonitos, imaginate los que quiero regalarte, los que aunque no merezcas te daré sin pensar, sintiendote, una vez mas, sintiéndolo.
Sintiendo este amor profundo, o quien sabe, quizás este odio, esta rabia contenida hacia ti, hacia tu manera de ser; hacia tus ojos, tu lengua, tus manos, todo aquello que me enloquece, que me hace perder el control, tener ganas de ti, muchas ganas de ti.
De que me des tú y de que me des más, de abrazarte, de no soltarte, de no perderte.